Mi novio me dejó el día del Corpus Christi (para los ateos, eso fue el jueves de fiesta hace dos semanas). Eso, hasta cierto punto, es normal, porque este chico y yo hemos tenido todos los "hechos destacados" de nuestra relación en días más o menos reseñables. "Bueno", me dije tras el palo inicial, "céntrate en otras cosas. Da igual que te acuerdes de él hagas lo que hagas, da igual que alquilases el piso en el que vives sólo por poder tomar un baño de espuma - que nunca tomaste - con él en la enorme bañera del cuarto de baño, da igual que te comprases una cama de matrimonio en un cuarto de 4x4m sólo para que pudieseis dormir juntos sin acabar con dolor de espalda y sin que nadie se cayera de la cama durante la noche. Da igual que tengas aún en su armario unos calzoncillos, unos calcetines, una camiseta y una corbata suyos para la próxima vez que se quedara a dormir. Da igual. Vas a seguir adelante. Céntrate en algo que no te recuerde a él".
"A ver, ponte delante del ordenador y haz algo productivo. Mira, tienes un montón de audios de las sesiones de guión de los proyectos que... que tienes en común con él. Y en los audios le oyes hablarte con cariño, y decirte cosas dulces, y..."
"Vale, mala idea. Mejor escribe algo. Tienes un montón de guiones a medias, puedes ponerte con ese guión que tienes para la editorial que está montando él junto con un amigo, y en cuya historia te ayudó, y..."
"Vale, bueno, vale. Prepárate el monólogo que quieres mandar para lo de nuevos cómicos. Sí, eso está bien. Sólo tienes que coger uno de tus monólogos, uno de los que más le gustó a él, y..."
"Vale, vale. Esta tarde me voy a guionizar el largo en el que estamos trabajando unos amigos y yo... y él, por supuesto. Pero estaré centrada en el guión, claro. Mientras él está sentado en la cama, tras de mi, discurriendo la mejor manera de hacer que el prota y la prota acaben juntos, y yo me aguanto las ganas de levantarme y abrazarle..."
"Hasta ahora no has tenido buenas ideas... Bueno, céntrate en el trabajo. Si estás trabajando todo el día, te irá mejor. A ver, sí, vamos al trabajo que seguro que hay cosas que hacer. Si tan sólo hubiese algo de trabajo, y no me tirase ocho horas mano sobre mano pensando en lo patética que soy y el asco que le doy al mundo y en concreto a él..."
"En fin, céntrate en otra cosa. No pasa nada, no se acaba el mundo, sigue adelante. No importa que no tengas ganas ni de respirar, tú sigue haciendo cosas. No importa que te den tirones en los gemelos por las mañanas de los ataques de nervios que te dan todas las noches, y que el mero hecho de levantarse para ir al baño sea una odisea, tú sigue yendo al trabajo y haciendo cosas. No importa que cada vez te duela más, tú sigue haciendo cosas. En serio, no importa, tú sigue esforzándote, lo estás haciendo muy bien."
Sí, eso me ha dicho todo el mundo, que lo estoy haciendo muy bien. Como si repasase la coreografía para el baile de fin de curso o algo así, en vez de estar intentando luchar contra unas ganas cada vez más grandes de tirarme en la cama y no volver a levantarme. Y yo sigo haciendo cosas, me hagan más o menos daño, me cuesten más o menos, me destrocen o no por dentro.
Hasta ayer.
Ayer, en un intento desesperado por animarme, tras haberme tirado llorando toda la noche del sábado y gran parte de la mañana del domingo, decidí ir a la partida de rol que estoy jugando con unos amigos - y con él, justo, lo habéis adivinado -.
"No importa que no puedas ni levantar la cabeza del suelo de lo mal que te sientes, no importa que sólo mirarlo hace que sientas ganas de arrancarte el corazón de cuajo y tirarlo por la ventana sólo para que deje de doler. No importa, tú sigue haciendo cosas. Cuando menos cuenta te quieras dar, te dejará de doler."
Quedo con él en la renfe - somos vecinos, alquilé el piso en Fuenlabrada, además de por el bajo alquiler y por la bañera, para estar cerca de él - y me aparece con toda la recua de amigos. Genial, no pasa nada, también me llevo bien con ellos, no importa que me vean hundida, humillada, abandonada por un hombre que no me aguanta, en gran parte por desagrado suyo... No importa, tú pon buena cara, no te vayas a tu casa a llorar, como querrías hacer. Aguanta el tipo, lo estás haciendo muy bien.
Llegamos al andén, el tren acaba de llegar. Me adelanto para entrar y pillar sitio, piso la banda coloreada que marca el final del andén con mis merceditas con suelas de plástico, el pie me patina, el tobillo me falla, y me cuelo por el agujero entre coche y andén.
Bueno, en honor a la verdad, sólo se coló mi pierna izquierda. Mis costillas, al chocar contra el vagón, y mi rodilla derecha, al golpear contra el suelo del andén, impidieron que cayese del todo. Y creo que junto con mi costado y mi rodilla - operada del menisco y que tengo que tratar como a una muñeca de porcelana, por cierto - se me golpeó también algo en la cabeza. Y a diferencia de los huesos, esto sí se rompió.
Ya estoy harta. No sé quién coño está orquestando todo para putearme de maneras insospechadas, pero estoy hasta los cojones. No paro de hacer cosas, y cada vez me siento peor, y me cuesta más no pensar en él, y en que me ha dejado porque no me soporta. No puedo dejar de pensar lo patética que soy, y como si el universo quisiera hacerme ver que estoy en lo cierto, se dedica a putearme como no lo ha hecho en años. Ayer, tras la partida, me puse a llorar y no paré prácticamente en toda la noche. Esta mañana he estado llorando desde que me he levantado hasta que he llegado al trabajo, y me están dando ataques de llantina más o menos cada media hora. Quiero irme a casa y poder llorar a gusto tirada en mi cama, no quiero hacer absolutamente nada, no quiero que la gente siga diciéndome lo bien que lo estoy haciendo porque no me está sirviendo de una mierda, y encima no paran de darme ostias - ¡literalmente! - por todos lados. Quiero meterme en la cama y llorar por lo que he perdido. Quiero llorar hasta que no me queden lágrimas, y luego beber un poco de agua para poder seguir llorando otro rato. No tenéis ni la más mínima idea de las ganas de llorar que tengo... ¿y de qué te va a servir eso?, me preguntaréis. Bueno, ¿de qué me sirve todo lo demás? De mucho, diréis vosotros. De lo mismo que llorar, diré yo. De nada.
Y al menos, si no salgo de la cama, Dios, o quien sea que se esté riendo de mi, dejará de hacer que me caiga en los huecos entre coche y andén. Aunque puestos a putearme, también podría hacer que el techo se me caiga encima...
"A ver, ponte delante del ordenador y haz algo productivo. Mira, tienes un montón de audios de las sesiones de guión de los proyectos que... que tienes en común con él. Y en los audios le oyes hablarte con cariño, y decirte cosas dulces, y..."
"Vale, mala idea. Mejor escribe algo. Tienes un montón de guiones a medias, puedes ponerte con ese guión que tienes para la editorial que está montando él junto con un amigo, y en cuya historia te ayudó, y..."
"Vale, bueno, vale. Prepárate el monólogo que quieres mandar para lo de nuevos cómicos. Sí, eso está bien. Sólo tienes que coger uno de tus monólogos, uno de los que más le gustó a él, y..."
"Vale, vale. Esta tarde me voy a guionizar el largo en el que estamos trabajando unos amigos y yo... y él, por supuesto. Pero estaré centrada en el guión, claro. Mientras él está sentado en la cama, tras de mi, discurriendo la mejor manera de hacer que el prota y la prota acaben juntos, y yo me aguanto las ganas de levantarme y abrazarle..."
"Hasta ahora no has tenido buenas ideas... Bueno, céntrate en el trabajo. Si estás trabajando todo el día, te irá mejor. A ver, sí, vamos al trabajo que seguro que hay cosas que hacer. Si tan sólo hubiese algo de trabajo, y no me tirase ocho horas mano sobre mano pensando en lo patética que soy y el asco que le doy al mundo y en concreto a él..."
"En fin, céntrate en otra cosa. No pasa nada, no se acaba el mundo, sigue adelante. No importa que no tengas ganas ni de respirar, tú sigue haciendo cosas. No importa que te den tirones en los gemelos por las mañanas de los ataques de nervios que te dan todas las noches, y que el mero hecho de levantarse para ir al baño sea una odisea, tú sigue yendo al trabajo y haciendo cosas. No importa que cada vez te duela más, tú sigue haciendo cosas. En serio, no importa, tú sigue esforzándote, lo estás haciendo muy bien."
Sí, eso me ha dicho todo el mundo, que lo estoy haciendo muy bien. Como si repasase la coreografía para el baile de fin de curso o algo así, en vez de estar intentando luchar contra unas ganas cada vez más grandes de tirarme en la cama y no volver a levantarme. Y yo sigo haciendo cosas, me hagan más o menos daño, me cuesten más o menos, me destrocen o no por dentro.
Hasta ayer.
Ayer, en un intento desesperado por animarme, tras haberme tirado llorando toda la noche del sábado y gran parte de la mañana del domingo, decidí ir a la partida de rol que estoy jugando con unos amigos - y con él, justo, lo habéis adivinado -.
"No importa que no puedas ni levantar la cabeza del suelo de lo mal que te sientes, no importa que sólo mirarlo hace que sientas ganas de arrancarte el corazón de cuajo y tirarlo por la ventana sólo para que deje de doler. No importa, tú sigue haciendo cosas. Cuando menos cuenta te quieras dar, te dejará de doler."
Quedo con él en la renfe - somos vecinos, alquilé el piso en Fuenlabrada, además de por el bajo alquiler y por la bañera, para estar cerca de él - y me aparece con toda la recua de amigos. Genial, no pasa nada, también me llevo bien con ellos, no importa que me vean hundida, humillada, abandonada por un hombre que no me aguanta, en gran parte por desagrado suyo... No importa, tú pon buena cara, no te vayas a tu casa a llorar, como querrías hacer. Aguanta el tipo, lo estás haciendo muy bien.
Llegamos al andén, el tren acaba de llegar. Me adelanto para entrar y pillar sitio, piso la banda coloreada que marca el final del andén con mis merceditas con suelas de plástico, el pie me patina, el tobillo me falla, y me cuelo por el agujero entre coche y andén.
Bueno, en honor a la verdad, sólo se coló mi pierna izquierda. Mis costillas, al chocar contra el vagón, y mi rodilla derecha, al golpear contra el suelo del andén, impidieron que cayese del todo. Y creo que junto con mi costado y mi rodilla - operada del menisco y que tengo que tratar como a una muñeca de porcelana, por cierto - se me golpeó también algo en la cabeza. Y a diferencia de los huesos, esto sí se rompió.
Ya estoy harta. No sé quién coño está orquestando todo para putearme de maneras insospechadas, pero estoy hasta los cojones. No paro de hacer cosas, y cada vez me siento peor, y me cuesta más no pensar en él, y en que me ha dejado porque no me soporta. No puedo dejar de pensar lo patética que soy, y como si el universo quisiera hacerme ver que estoy en lo cierto, se dedica a putearme como no lo ha hecho en años. Ayer, tras la partida, me puse a llorar y no paré prácticamente en toda la noche. Esta mañana he estado llorando desde que me he levantado hasta que he llegado al trabajo, y me están dando ataques de llantina más o menos cada media hora. Quiero irme a casa y poder llorar a gusto tirada en mi cama, no quiero hacer absolutamente nada, no quiero que la gente siga diciéndome lo bien que lo estoy haciendo porque no me está sirviendo de una mierda, y encima no paran de darme ostias - ¡literalmente! - por todos lados. Quiero meterme en la cama y llorar por lo que he perdido. Quiero llorar hasta que no me queden lágrimas, y luego beber un poco de agua para poder seguir llorando otro rato. No tenéis ni la más mínima idea de las ganas de llorar que tengo... ¿y de qué te va a servir eso?, me preguntaréis. Bueno, ¿de qué me sirve todo lo demás? De mucho, diréis vosotros. De lo mismo que llorar, diré yo. De nada.
Y al menos, si no salgo de la cama, Dios, o quien sea que se esté riendo de mi, dejará de hacer que me caiga en los huecos entre coche y andén. Aunque puestos a putearme, también podría hacer que el techo se me caiga encima...
Llorar libera tensiones. Cada cual tiene su manera. Yo me dedico a leer un rato, estar solo, comerme los sentimientos y luego explotar sin razón aparente.Cojonudo, vamos.
ResponderEliminarEso sí, lo tuyo con el transporte público es preocupante. Habría que regalarte el casco y las espinilleras y que los usases cada vez que vayas a montar en algo que lleve el logo de la comunidad de madrid, en serio X-D
La etapa de superación después del “punto y a parte” o “punto y final”, siempre suele ser doloroso, triste, diferente, o como tu lo describes… La sensación de querer que te quiten el corazón sin anestesia. De todas formas he estado leyendo el mensaje de hoy y me ha impactado eso de “abandonada por un hombre que no me aguanta, en gran parte por desagrado suyo...” Me suena esa historia porque hace unos años me ocurrió aquello, lo pasé muy mal, estuve como tú durante mucho tiempo aunque al final como te he dicho después todo pasa. Solo te digo que en el mundo de las relaciones el juego es de dos, no solo de uno. No pienses que tú eres lo peor o que tienes la culpa de lo que ha ocurrido, las dos partes tienen el 50% de culpa como aquel que dice. E incluso mucho después te darás cuenta que a lo mejor fue él quién tuvo mas culpa, porque a veces nos echamos nosotros mismos todo a la espalda… Y eso no puede ser.
ResponderEliminarSolo te digo que si ha ocurrido esto es que esa persona que cambiará del todo tu vida y te hará sentirte feliz contigo mismo y con todo lo demás, está por llegar. Y sino ha sido él, es que esa otra persona te hará el doble de feliz. A mí me ocurrió y francamente agradecí haber pasado todo lo malo, porque disfruté el doble y me sentí simplemente feliz sin preocupaciones. Mucho ánimo que te mereces todo lo mejor :)
@Ender: No termino de ver productiva tu manera de descargar tensiones... Aunque claro que lo mío tampoco puede ser sano... o_O A veces me pregunto si es que a los frikis nos hicieron alérgicos a los términos medios...
ResponderEliminarAhí te equivocas. Yo salgo a la calle y me accidento, sin necesidad de entrar en ningún tipo de transporte público. Ostento el dudoso honor de ser la única persona a la que conozco que han atropellado tres veces. Aunque una de ellas fue corriendo a coger el bus, ahora que lo pienso...
@Stickers: De nuevo, muchas gracias por tus palabras. No encuentro consuelo en ellas, como no lo he encontrado en nada hasta ahora, pero se agradece mucho que la gente sea amable conmigo. Supongo que, si no sigo cayendo aún más, terminaré por ponerme mejor... digo yo ._.U
Pero en una cosa te equivocas. No hay nadie esperando para hacerme feliz. Y si está esperando, alguien le ha programado el bulbo raquídeo para que salga en estampida más o menos al año de conocerme. Uno no puede vivir pensando "mi principe azul llegará, si este tío no me aguanta era porque no es el adecuado", porque simplemente, puede que el principe azul nunca llegue porque de verdad que no hay dios que le aguante a uno. Hacerse ilusiones basándose en los cuentos de hadas no es sano.
Mariu: si a mí me aguantan, con mis manías, mis domingos por la tarde ocpuados por la tira de sinergia, mis alzheimers, mi absoluta indiferencia por cualquier cosa que no sea el día a día, mis despistes y mi caos a la hora de organizarme, mis idas de olla cuando me quedo solo en casa,...
ResponderEliminarten por seguro que alguien te aguantará a tí. y viceversa, que esto es quid proquo, o como coños se diga.
Y obviamente, no te está esperando. porque esperar implica conocimiento, y ya tendrías al interfecto tocando a la puerta con el cepillo de dientes. La mayor parte de las veces, las relacciones se inician con algo intermedio entre un choque de trenes y un meteoritazo en toda la jeta, de manera totalmente imprevista y con todo tipode inconvenientes por medio, además de la sensación de "pero este...¿qué coño se ha creído¡ vaya pedazo de gilipollas!"
Tómatelo como un interludio. Al fin y al cabo, la ruptura significa que la cosa ha parado antes de ir a peores. Y peores podía implicar cargar con mochila casa/niño y una ruptura de rebote. Como dice el sabio Igor ([aigor]), "podría ser peor...podría llover". Hay otras frases inconmensurables de esta película, pero no encuentro sitio en este comentario donde poner eso de "vaya par de aldabas" que dice el profesor fronkonstin :-DDDDD
p.d: Dicho con ánimo de animar, no con el de relativizar.
Cada uno tiene su manera de superar las cosas. Usa el método que mejor te vaya, y pásalo cuanto antes. Y si el método no funciona, busca otro.
ResponderEliminarPD: mi método consiste en calzarme guantes, espinilleras y palos e irme a subir experi...estooooo, a entrenar. Por si te vale, que no creo.
@Ender: Como no me quiero poner a discutir quién es más insufrible de los dos, vamos a dejarlo en un "muchas gracias por tus palabras", porque a fin de cuentas se agradecen ^^ Si la ruptura de malas no ha sido, pero el que quería romper era él, no yo ._.
ResponderEliminar@Asbeel: ¿Es Kendo, Aikido, o qué, lo que practicas? ¿Hay algún dojo por Madrid? Yo sé de uno en Acacias, pero me pilla muy lejos y no llego a tiempo después del curro ._. Yo nunca he pasado por esto, ahora mismo estoy intentando descubrir cómo narices salgo de esta... aunque supongo que si ya me encontrase bien después de menos de 15 días, es que mucho no me habría importado ^^U
precisamente; si él quería romper, alégrate que haya sido ahora que no había rehenes por medio :-(
ResponderEliminaren cuanto al nivel de insufribilidad... yo que sé. ¿hay escala oficial? ¿concursos? yo soy tan insufrible que me echarían del concurso por pesao :-DDDDDD
Si preguntas por Kendo en Madrid, hay 2 Dojos(que yo conozca) uno el que tu dices en Acacias(que antes estaba en Noviciados) y otro que entrenan en Avenida de America, en el polideportivo del Moscardo.
ResponderEliminarSi como he intuido curras por la zona de Alcobendas(como casi todo el mundo que curra en algo de esto) El que mejor te pilla es el de Avenida de America, ademas comienzan a entrenar un poco tarde.
Est es la pagina del Dojo de Avenia de America, entrena el Club Kenwakai.
http://www.kenwakai.org/
Este es la pagina del Dojo de Acacias, aqui entrena el club Zanshin Madrid.
http://www.zanshin-madrid.com/
Si preguntas sobre cual esta mejor, pues he entrenado en ambos y tiene muy buena gente en los dos. Yo tras un paron de casi 2 años lo voy a retomar este y cuento los dias para viajar en agosto a Madrid a por mi bogu.
Y respecto al tema que del post, solo te dire una frase: "Si caes 7 veces, levantate 8"
Oh dios, un concurso de insufribles! Yo! Yo! Me apunto! Os destrozo por goleada, aficionados!
ResponderEliminarPractico Wing-tsun y Escrima. Bueno, y hapkido (que no aikido), pero de eso no he encontrado en Madrid. Desventajas de cambiar de aires.
También hice algo parecido al aikido y kendo, pero lo desestimé por arcaico. No me entiendas mal, son interesantes y bonitos, pero a mi lo que me llama es la defensa personal, y no me voy a dar katanazos por la calle ^^
De todas formas soy un frikazo con todas las de la ley de artes marciales, deportes de contacto y defensa personal, así que si te interesa algo de esto estoy a tu disposición ^^
insufrible no sé, pero no te voy a llevar la contraria. Joder, chuck norris a tu lado parece el teletubbie verde (por decir un color que no sea el morado, no me vaya a caer un hapkidonazo) :-P
ResponderEliminar@Ender: Supongo que sí, dentro de lo malo, es bueno cuando aún no hay nada ni nadie más de por medio en una ruptura... aunque estuvimos viviendo juntos cinco meses y fue de maravilla, los problemas surgieron al irme yo de su casa ^^U En fin, para qué le voy a seguir dando vueltas, bastante tengo con los bajones que me dan todos los dias al ponerse el sol (tengo mal de mortalidad, como Lestat :P)
ResponderEliminar@Kagemaru: Muchas gracias por la info! Ahora que tengo más tiempo libre y menos dinero que gastar en salir, creo que me apuntaré, que siempre he querido ^^ Curro en Mirasierra, pero vamos, kestá casi al lado de Alcobendas, y me viene mejor aún :P
Ya hijo ya, gracias por el consejo. Si lo peor de todo es que sé que me acabaré levantando... pero es que estoy un poco hasta los cojones de caerme ._.U
@Asbeel: Parafraseando a Ender... Yo mejor me llevo bien contigo... Seamos amigos! (pero no me peges! >.<)
Un antiguo compañero de curro hacía escrima, y mola mazo, pero las ostias con esos palos tienen que doler mucho... venía con unos moratones... ^^U
Yo soy una fan de lo oriental en general, y de lo japonés en particular, así que cualquier aportación es bienvenida :P
Puede que no esté esperándote, como te han dicho por aquí, puede que aparezca de repente y no te caiga bien al principio, pero luego… :) Y no creo que las personas que aparezcan salgan huyendo al año de conocerte, que eso te haya pasado antes, no significa que te vuelva a ocurrir. A lo mejor eres tú quien sale huyendo de ellos porque no son lo que parecen! :D No te digo que creas en cuentos de hadas, eso solamente son para los niños, pero si puedes tener un final feliz de miles de formas. O simplemente disfrutar de los momentos. Bueno, no hablo mas… Como siempre te envío un beso y un abrazo ;)
ResponderEliminarQuién sabe ^^ El único modo de saber lo que pasará mañana es acostarse ^^U
ResponderEliminarGracias por tus palabra :)
Uaaaaao, eso de dormir es como viajar al futuro! :-DDD
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