Ventajas y desventajas de las bajas laborales

Como ya sabréis, la semana pasada y parte de esta me la he tirado de baja. No ha sido especialmente agradable, porque como tenía la espalda perjudicada mi rango de acción se limitaba a estar tirada en la cama releyendo Fábulas, y estar tirada en el sofá viendo una y otra vez la saga de Terminator. Lo cual le ha venido de culo - nunca mejor dicho - a mi régimen, porque gran parte de él estaba basado en la actividad física. Si es que soy una desgraciada hasta para lesionarme... Si me hubiera hecho daño en los brazos, podría haber seguido haciendo piernas, y si me hubiera jodido las piernas, podría haber seguido haciendo brazos. Pero no, tenía que ser en las costillas. En toda la espalda, para que me duela hasta respirar. Yo es que las cosas o las hago bien o no las hago, qué cojones.

En fin, que como últimamente me he pasado mucho por el blog de Asbeel, me ha dado envidia y voy a hacer yo también una lista de pros y contras de algo.
Tengo la baja reciente, así que la voy a hacer sobre ello. Pero baja de las de verdad, de las que no te dejan ni moverte, no de las de "soy colega del médico y me apetecen unas vacaciones", ¿eh?.

Pros de estar de baja:

1. Primero y más importante: ¡No hay que madrugar!
No creo que haga falta decir nada sobre las virtudes de esta ventaja, así que lo dejo aquí.

2. Tienes tiempo libre para hacer todas las cosas - que no requieran un especial esfuerzo físico por tu parte - que llevas aparcando desde hace meses porque entre el trabajo, la compra, la limpieza y ver House no has tenido tiempo de hacerlas.
O sea que por fin vas a poder poner en orden la correspondencia, mandar todos los mails pendientes, cogerle el bajo a esos pantalones que compraste hace meses pero te vienen muy largos para ponértelos, colocar el armario, recoger el paquete que tienes en correos muerto de risa desde el pleistoceno...
Ay, qué pereza, si es que estás de baja, ya lo harás cuando tengas más fuerza.

3. Tienes excusa para no hacer las tareas de limpieza.
Lo cual, en un piso compartido, no suele ser un problema de por sí, pero de vez en cuando, normalmente el fin de semana que más hasta el gorro estás del mundo y sus alrededores, a uno de tus compañeros le da por decir que la casa está hecha un asco y que os pongáis a limpiar.
Claro, como sólo trabajas nueve horas al día de lunes a viernes, lo lógico es que te tires todo el fin de semana limpiando la casa, para relajarte y descansar.
Y no me vale eso de que si se barre todos los días luego no hay que limpiar, porque si se barre sólo se limpia el suelo. Lo cual es bueno si no se tienen muebles, pero totalmente inútil en caso contrario. No he oído hablar de ninguna escoba que quite el polvo a los muebles, limpie los radiadores, friegue los cristales, lave las cortinas y friegue los sanitarios y los azulejos del baño, la verdad. Si me he perdido algún avance tecnológico a ese respecto, por favor ponedme al día.

Pero claro, como estás de baja, simplemente comentas que estás muy débil para moverte, y te quedas en camita con los cascos leyendo mientras los demás pringan. Total, cuando te cures vas a tener que limpiar igualmente, porque su concepto de la limpieza dista bastante del significado real de la palabra. Pero tú te quedas haciendo el vago, que es lo importante.

Contras de estar de baja:

1. Cuando la baja se acaba.
Porque claro, tú te has tirado pachucho en cama - o en sofá, el caso es que no des palo al agua - durante una semana o más, y como prácticamente no has hecho otra cosa más que dormir, tu reloj biológico se ha vuelto loco, y ahora no duermes de noche. Y cuando te toca levantarte a las seis y media el primer día tras la baja, no habiendo podido conciliar el sueño hasta las cuatro... Eso sí que es tortura de última generación, y no lo de la Naranja Mecánica.

2. Te aburres como una ostra.
Porque, no nos engañemos, no estás de vacaciones. Estás enfermo. Lo que quiere decir que no puedes salir de casa - o si sales, no puedes ir muy lejos sin que te entren los mil males -, que nadie puede venir a verte porque todos tus conocidos o trabajan o estudian, y que, básicamente, te tiras todo el tiempo de baja tumbado boca arriba planeando tu suicidio a falta de algo mejor que hacer. Que no digo que a mucha gente le parezca un planazo, pero a mi no termina de llamarme, no sé por qué.

3. Engordas.
Sin comentarios.

Bueno, la lista es chiquitilla, pero igual la amplio según se me vayan ocurriendo cosas. O igual no.

Ya me he acostumbrado a poner propinillas ^^ Aquí van estas dos (porque Megan Fox estará como quiera, pero de buena actriz tiene lo que yo te diga y menos):

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