Quiero contaros una experiencia que he vivido este fin de semana. La cosa va a ser larga así que voy a dividirla según el criterio que me parezca más oportuno mientras escriba. Esto va a ser una pequeña introducción. ... Mi novio se apuntó hace dos años a una variedad de karate llamada kyokushinkai - o Shinkyokushin, o Shinkyokushinkai, dependiendo de la federación con la que estés hablando -. Fue el típico caso del amigo pesado que a base de dar la murga consigue convencer a su presa. Mi niño, que no es influenciable en gracia de Dios, acabó más enganchado al arte marcial que su amigo - que de hecho lleva casi un año sin pasarse -. En concreto se ha involucrado mucho en la buena marcha del dojo: Ayuda en la organización de los torneos, siempre se ofrece voluntario para cualquier cosa que haya que hacer, va a todas las convivencias y seminarios... Precisamente en el tema de convivencias y seminarios me quedo: El fin de semana pasado hubo una especie de seminario/conviv...