Ir al contenido principal

Filosofando, y tal

¿Os habéis parado a pensar en qué es lo que realmente quieren decir los votos matrimoniales?
Quiero decir, dejando a un lado toda la parafernalia del casarse de blanco - ¡juas! -, la fiesta, los regalos, la luna de miel... todas esas cosas que tanta ilusión le hacen a una mujer y tanto miedo le meten en el cuerpo a un hombre.
Que todo eso está muy bien, no lo voy a negar, yo misma diseñé mi vestido de novia a los diez y seis años. Pero, de verdad, ¿alguien se ha parado a leer tranquilamente las frases que se dicen los novios - o que el cura les pregunta, depende del caso - cuando están intercambiando los anillos? Porque a mi me da que aparte de memorizarlas y repetirlas como papagayos cuando toca, poco más se hace.

Es un acto con un tremendo simbolismo, ahora que lo pienso, el decir esas frases mientras se intercambian los anillos. Es una especie de "Estoy tan seguro de lo que digo, que mientras lo hago lo sello con este anillo, para que quede por siempre constancia de ello".

Realmente esa frase es lo único que queda con un mínimo sentido dentro las operetas en que se han convertido hoy en día las bodas. No me extraña que la gente joven ya no crea en el matrimonio... pero también es cierto que cuando sólo se piensa en el bienestar propio, es muy difícil que alguien quiera entregarse a otro, con todas las ventajas e inconvenientes que ello conlleva. Eso de los inconvenientes no se lleva con mucha elegancia en la sociedad del bienestar en la que vivimos.

Ains, que me salgo del tema.

No importa ni dónde se celebre, ni quién asista, ni a dónde se vaya después, ni qué regalos se reciban. No importan las firmas en el papel - bueno, eso de cara al estado sí que importa, todo hay que decirlo -, no importa quién esté delante para atestiguarlo. Lo único que importa es que dos personas se han entregado la una a la otra, plenamente conscientes de lo que ello significa - que eso tampoco se ve mucho últimamente -, porque así es su deseo.
Personalmente, no me extraña que más de la mitad de los matrimonios acaben en divorcios: Hoy en día lo que importa es casarse, el premio a corto plazo. Poca gente se plantea cómo va a ser la vida a largo plazo con la persona elegida, o lo que realmente significa casarse, aparte de ponerse un traje bonito, recibir regalos, y ascender en el status social.


"Estoy aquí, frente a ti, para decirte lo que tu ya sabes, pero ahora quiero decirlo delante de todo el mundo para que no quede nadie sin saber lo que siento, y todos compartan mi dicha al decírtelo de nuevo. Estoy aquí para prometerte una vez más que, suceda lo que suceda, estoy aquí para ti, para lo que me necesites, y tanto si me necesitas como si no. Estoy aquí por el resto de mis días, porque eres tú quien me completa, eres tú con quien quiero compartir la salud, la enfermedad, las alegrías, las lágrimas, la riqueza, y la pobreza. Tú y ninguna otra."

Comentarios

  1. En los viejos tiempos, si eras ric@ tu matrimonio se habia concertado varios meses antes de que nacieras, y poco tenías tú que decir al respecto. Si eras pobre, te casabas con alguien que no te diera ganas de vomitar y a quien no le importara demasiado compartir el techo y la comida contigo... más que nada porque viviendo sol@ se tenían muchas menos posibilidades de sobrevivir.

    Para millones y millones de personas a lo largo de la Historia y del mapa, el amor y el matrimonio han tenido tanto que ver entre sí como la velocidad y el tocino.

    Aquí y ahora, en cambio, tenemos la libertad de elegir. Elegir cuándo, con quién y cómo. También durante cuánto tiempo. La libertad es poder, y el poder conlleva responsabilidad. Una responsabilidad que much@s no estamos preparados para manejar.

    Y respecto a los votos, una curiosidad:
    http://www.parroquiasanfranciscosj.com/Despacho/lecturas_matrimonio.htm

    ^_^

    ResponderEliminar
  2. Es curioso, creo que el amor y el matrimonio siguen sin tener nada que ver en la mayoría de los casos ^^U

    Que me había puesto toa tonta, leñe, no vengas y me rompas la atmósfera, con lo bucólico que me había quedado todo XDDDD

    Una de mis amiguis por internet anda con problemillas maritales, y me da penita ._.

    http://southerndelight.deviantart.com/art/In-Him-128732444

    ResponderEliminar
  3. ¡Qué gonito!
    La verdad es que coincido plenamente; casarse es simplemente una confirmación de una voluntad que ya debe estar ahí, pero no confirmación en plan "firmo esto y estamos atados", sino "mostrar a nuestros allegados que nos queremos y queremos estar juntos".

    Y por supuesto, el tener el papelito que dice que has formado una unidad familiar te facilita las cosas con papá estado, pero noe s necesario pasar por la iglesia para obtenerlo. Con un ayuntamiento majete, la cosa incluso puede tener más gracia, dado que una boda civil tiene un aire mucho más de fiesta (que es lo que es, carajo); porque lo serio ha venido antes, cuando has tomado la decisión de pasar tu vida ocn otra persona. Una boda tiene que ser algo que radie felicidad porque el compromiso ya está de antes.

    ResponderEliminar
  4. /agree.
    Lo difícil realmente está en encontrar y reconocer a esa persona, y que "esa" persona también quiera pasar el resto de sus días contigo. Porque somos chorrocientos en el mundo, y aunque el señor que dijo que todos tenemos nuestra media naranja hubiese tenido razón, a ver cómo nos las apañamos para encontrarla... Igual es de otro continente... o aún no ha nacido!
    Además, el hecho de que uno se enamore de alguien no hace que ese alguien se enamore de uno... *snif*

    Eh... demasiada introspección por hoy, voy a ver si escribo alguna fribolidad, y así me animo xD

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Cosas para hacer bulto mientras se me ocurre algo

Estoy fascinada. Llevo más de dos semanas de convivencia con otras cinco chicas, en una casa que si bien de modo absoluto es desproporcionadamente grande, al añadir el dato de que alberga a seis féminas se vuelve de tamaño medio. La segunda ducha - ahora ya está demostrado, con voltímetro y notario incluidos - da calambre, así que sólo tenemos un cuarto de baño completo para ducharnos. El suelo de tarima flotante tiene complejo de capa tectónica y no para de ondularse y abombarse por todos lados. Durante dos terribles días el fregadero y la lavadora se declararon en huelga y se negaron a expulsar agua por sus respectivos desagues. Internet sólo va como Dios manda en el salón, y en las habitaciones nos dedicamos a conectarnos a las redes no seguras que estén detectables en cada momento - menos yo, que como mi habitación no es exterior no cojo ninguna -. El extractor de la cocina sólo funciona cuando el calentador está parado y las luces secundarias de la cocina apagadas. Vamos, que no p

Crónica de una búsqueda de piso - Tercera entrega: Como toda trilogía, la tercera parte es la última

Sí señores, parece que ya tengo un lugar a donde irme a vivir cuando me vaya de la trampa psicológica en la que se ha convertido mi actual hogar. Y es una pena, porque tras cada mudanza paso por un periodo de adaptación que suele durar entre dos y tres meses, durante los cuales estoy bastante de los nervios porque no reconozco mi hogar en el sitio en el que vivo. Y ya llevo tres mudanzas en menos de un años. Echad cuentas de cuántos meses he estado de los nervios. .. ........................................ Primera parte aquí Segunda parte aquí Viernes. Ese día tenía concertadas tres visitas a pisos: Un ático a compartir con otras tres chicas a las seis y media, un piso a compartir con una francesa y una inglesa a las siete y media, y otro a compartir con dos chicos y una chica a las ocho y media. Tras una agradable comida con Trini y un no menos agradable paseo por el abrasador sol de Madrid centro, cogí el autobús en Guzmán el Bueno en dirección a Argüelles, la zona donde estaban los

Oda a mi ego (o Porque Yo Lo Valgo)

Ayer tenía la intención de empalmar, dado que me he tirado todo el fin de semana durmiendo, y tengo el sueño ya no cambiado, sino totalmente desquiciado. Pensaba que una terapia de choque me lo regularía, aunque al final acabé yéndome a la cama a las tres y cuarto, porque se me cerraban los ojos frente al ordenador y no podía teclear y usar la tableta gráfica mientras me sujetaba los párpados, me faltaban manos. Así que sobre las tres de la mañana comencé a recoger el chiringuito y a preparar las cosas para hoy, que iba a ser un día muy liado. En uno de los paseos por el cuarto me vi reflejada en el espejo. Por algún extraño motivo, suelo ponerme bastante guapa cuando tengo sueño o estoy especialmente decaída - es por eso por lo que afirmaré hasta la muerte que yo he nacido para gótica -, y como ayer se cumplían los dos supuestos, incluso con ojeras y todo me gustó mucho mi reflejo. Así que cogí el móvil, y me hice unas cuantas fotos en las que, oh milagro de la naturaleza, apenas sí s