Quiero empezar diciendo que me parece tremendamente hermoso que gente de tan diversas ideologías políticas, religiosas, y existenciales en general, nos hayamos unido por fin para exigir que nos traten con más respeto. Llevo hablando del tema mucho tiempo, y no puedo por menos que alegrarme por ello.
Ahora bien, la trampa de esto es precisamente la diversidad de la gente que protesta. Los detractores de las protestas, entre otros argumentos, nos atacan diciendo que mucho quejarnos, pero que no proponemos nada. Así que han ido surgiendo propuestas en el movimiento, primero más generales, como que desaparezcan según qué privilegios de la clase política, que los votos dejen de valer más o menos dependiendo de dónde viva el votante, que no tengamos que cotizar 80 años para que nos quede una pensión decente, o que las empresas que tengan beneficios no puedan despedir a gente porque sí, aludiendo a la crisis.
Todas esas medidas son de sentido común, totalmente apolíticas, y cualquier persona con dos dedos de frente debería exigírselas al partido al que va a votar.
Independientemente de su orientación política.
De hecho, el que haya gente que no esté de acuerdo con estas reivindicaciones, o que piense que exigirlas es una estupidez, me hace pensar que algo va muy mal en el sistema educativo español, para haber parido a según qué espécimenes.
Ahora bien, según las propuestas se van haciendo más concretas, ha habido gente de entre los que protestan que ha dejado de estar de acuerdo con ellas.
No debemos olvidarnos de que en las acampadas hay jóvenes de extrema izquierda, abuelos de extrema derecha, católicos practicantes, ateos convencidos, republicanos, monárquicos, comunistas, capitalistas, y si te pones a buscar seguro que también encuentras a más de un perro verde.
Porque nuestro principal eslogan es que esto no es un movimiento político, sino una protesta de ciudadanos indignados. Lo que queremos es que los diferentes partidos que en teoría representan nuestras ideas nos respeten y nos traten como seres humanos, y sólo eso.
No vamos a montar un partido político que aglutine las ideas de los manifestantes, porque los manifestantes no tienen una ideología común. Lo que buscamos es que cambie la manera de gobernar de los que supuestamente deberían servir al pueblo: Que no gobiernen pensando en nosotros como el ganado que les va a permitir vivir como dioses durante cuatro años más, y con suerte durante el resto de sus vidas, sino en personas con vida y voluntad, y con poder para hacerles caer si no nos respetan.
Me da igual que se diga que "esto lo ha orquestado el de siempre", o que piensen que según pasen estas elecciones todos vamos a volver a casa como los borregos que creen que somos. Me da igual que a la que llamen borrega sea a mi porque "ahora lo que está de moda es estar contra todo". Lo que no me da igual es que haya gente que, convencida y orgullosa de ello, vote a personas que ni la representan ni van a hacer nada por ella, o que con su inactividad permita que la panda de ladrones que nos gobierna siga donde está.
A la gente que piensa que levantarse y protestar no sirve de nada, les digo que no moverse es lo que no sirve de nada, y que si piensan eso, precisamente es porque nunca se han levantado, porque a los que están arriba no les conviene que lo hagan, y se han ocupado de que crezcamos pensando que las cosas son así y no se pueden cambiar. Es como atar a una estaca a una cría de elefante: Cuando crezca tendrá fuerza de sobra para romperla, pero como ha crecido convencido de que no puede, de adulto seguirá creyéndolo.
Y me da igual también que esa gente diga que cuando digo "sistema" y "los de arriba" no sé de lo que hablo, porque ellos tampoco tienen ni puta idea de lo que dicen cuando hablan de "los de siempre".
Tienen razón los que dicen que si tan descontentos estamos, deberíamos demostrarlo en las elecciones. Porque por mucho que la gente se queje de su gobierno, no hace nada por castigarles. Los políticos están tranquilos, porque saben que el país de borregos en el que les ha tocado vivir no va a hacer nada por echarlos. Se van a quedar en su casa "para mostrar su descontento", y van a permitir que el sistema se perpetúe, o van a votar ciegamente a esos señores que nos están quitando la dignidad poco a poco.
No se nos toman en serio porque cuando tenemos la oportunidad de demostrar que los que tenemos el poder somos nosotros, y que si nos dan por culo con botellas de butano vamos a joderles vivos, no lo hacemos. Y encima nos enorgullecemos de ser tan borricos.
Señores, mañana tenemos la oportunidad de mostrar nuestro descontento de manera pacífica. Tenemos el poder de decirles a los que nos están jodiendo que no pueden hacer lo que quieran con nosotros, que si nos tratan mal les vamos a mandar a la mierda y vamos a elegir a otros que puede que lo hagan mejor. Y si esos que elijamos también nos joden, vamos a volver a echarlos, y vamos a repetirlo hasta que se den cuenta que para estar donde están, primero tienen que respetarnos.
Menos "esto es así y no se puede cambiar", y más "no me toques los cojones que te meto un rayo por el culo". Esto es una democracia, demostremos quién lleva los pantalones.
No nos quejemos a la hora del café: Vayamos a votar. Y castiguemos a los políticos que no nos tratan con respeto.
Las cosas no van a cambiar en una semana, pero el que fabricó el tiempo hizo cantidad. Sigamos exigiendo que se nos trate con respeto, sigamos saliendo a la calle de forma pacífica, sigamos castigando a los políticos con nuestro voto. Que se den cuenta de que el pueblo, cuando actúa unido, es poderoso.
Somos cuarenta millones de personas, coño. No me hagáis creer que de veras no podemos hacer nada contra mil o dos mil chupópteros aprovechados.
Y lo que es peor, no lo creáis vosotros.
Mañana, y siempre que haya elecciones, por favor, informaros de las opciones, y votad. Castigad a los partidos con vuestro voto, pero de una forma responsable.
Porque siempre hay partidos que representen vuestras ideologías, no tenéis por qué votar al PP o al PSOE.
Sobre todo porque esos dos partidos ya no representan a nadie.
Te voy a denunciar a la JEC por influir en mi intención de voto el día de reflexión.
ResponderEliminarAhora en serio, buena reflexión. Es cierto que lo que se pide es de sentido común, pero sigo creyendo que para ser político es indispensable no tener de eso XD
Un abrazo y ánimo.